viernes, 9 de septiembre de 2011

Naturaleza Chilena



Hace pocos días, nuestro país, se volcó hacia el Archipiélago Juan Fernández, donde pudimos escuchar por radio y ver por tv e internet como un avión militar caía en un lugar indeterminado de la isla Robinson Crusoe. Aun seguimos atentos a lo que acontece ahí, pues nos conmovemos por la tragedia y hacemos propio el dolor humano familiar que genera la pérdida de un ser querido de forma tan violenta.

En 1972 una selección uruguaya de rugby viajaba a Chile para un partido amistoso con la selección de Old Boys de Santiago de Chile. El avión en el cual se transportaban cayó en medio de la Cordillera de Los Andes a la altura de Talca. Estuvieron mas de dos meses perdidos, donde incluso, para poder sobrevivir, tuvieron que practicar el canibalismo con sus propios compañeros. Puedieron sobrevivir en una prueba extrema, jamás conocida por la historia moderna.

Terremotos y tsunamis, son parte de la historia de Chile, y lo seguirán siendo, al igual que las inundaciones, heladas, sequías, nevazones y erupciones volcánicas. Quien no sea chileno, o no ha vivido o sentido algunas de estas manifestaciones naturales, no puede dimensionar lo que significa emocionalmente recuperarse y levantarse.

En agosto de 2010, Chile nuevamente es golepeado por una experiencia extrema. 32 mineros chilenos y 1 boliviano, de diferentes especialidades, iniciaron un turno mas en sus labores propias en la mina San José, cercana a la ciudad de Copiapó, a mas 1100 km al norte de Santiago. Sin que ellos lo supieran, quedaron atrapados dentro de la mina. Y por cerca de un mes no se sabía nada de ellos. Cuando por fin, se tuvo contacto, comenzó todo el proceso de poder sacarlos de ese lugar. El despliegue, único en Chile, fue extraordinario del Gobierno y privados. Logran salir en los primeros días de octubre de ese mismo año.

Todo lo anterior, no es mas que, queramoslo o no, estas experiencias extremas son parte de la identidad chilena. Pues es nuestro propio país con su geografía, su flora y fauna, la que también nos determina y nos da sentido de pertenencia al lugar donde nacimos. Pero es responsabilidad de todos, respetarla, hacerla propia y cuidarla.

Por Chile, siempre.